Salina Cruz, Oax.- El Centro Ambulatorio para la Prevención y Atención de VIH/SIDA, alertó sobre el alto índice de abuso sexual a menores en la región del Istmo, delito que sobresale en el municipio de Salina Cruz.
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Beatriz Toledo Lara, titular del departamento de Psicología, dijo que los casos son detectados principalmente a través de escuelas de nivel primaria, por lo que han iniciado una campaña de prevención.
Aunque no dio a conocer cifras, la fuente indicó que en marzo fueron alertados por la Unidad de Servicios de Apoyo a la Educación Escolar (USAER), organismo que atiende principalmente los casos de niños con problemas de aprendizaje en primarias, y es ahí donde se da la detección de abuso infantil.
“Se han presentado muchos casos, por eso surgió la inquietud de trabajar tanto por los maestros, padres de familia y alumnos. El abuso sexual no es lo mismo que una violación, cuando un menor es abusado sexualmente decimos que puede ser a todos niveles, desde la cuestión mental hasta la cuestión física y es un daño que es persistente”.
Explicó que el abuso sexual se configura legalmente cuando una persona seduce a un menor a través de pornografía visual, de revistas o pláticas y es cuando el menor empieza a sufrir un daño sexual que todavía no le corresponde y eso le crea consecuencias.
Ese abuso se comete generalmente por una persona que tiene una figura de poder, ya sea un padre, una madre, un maestro o un sacerdote.
Indicó que el abuso sexual infantil, tiene gran consecuencia, como el hecho de que los niños tienden a repetir esos patrones en edad adulta y van creciendo con un pensamiento diferente.
La psicóloga indicó que este tipo de abuso sexual infantil puede aparecer en todo tipo de familias, sin tomar en cuenta la posición económica, social, cultural o religiosa.
“Cuando una persona adulta fue abusada sexualmente cuando era menor, ese adulto tiende a repetir esa conducta en edad mayor”.
Admitió que a partir de los talleres implementados en el CAPASIT, se ha detectado a adultos que vivieron abuso infantil y se ha podido apoyar a estas personas para ir rompiendo con esas cadenas.
En el caso del menor que sufre este tipo de abusos, dijo que presentan conductas regresivas, como el hecho de dejar de hacer pipí y popó si ya podía hacerlo, además empiezan a mojar la cama, a tener pesadillas y dejan de comer.
Además de apartarse de la sociedad, tener bajo apetito, bajo rendimiento escolar, conductas agresivas o en algunos casos querer mostrar su cuerpo.
Detalló que para un niño que sufrió este tipo de maltratos, se tiene que hacer un trabajo profundo en cuanto a terapias, para superar este problema de maltrato.
En ese sentido, anunció una serie de talleres enfocados a este tema, a partir del día 10, 11 y 12 de agosto dirigido a los padres de familia; para niños de 8 a 11 años van a ser los días 17, 18 y 19 de agosto y para adolescentes los días 24, 25 y 26 de agosto, todo en las instalaciones del CAPASIT y completamente gratuitos.
Beatriz Toledo, indicó que la alerta está a nivel primaria y no descartó que en otros municipios también esté pasando lo mismo.