Puebla, Pue.- Del total de municipios que se encuentran en la declaratoria de emergencia emitida por la Secretaría de Gobernación (Segob), cinco son Pueblos Mágicos, donde ya se realizan peritajes para verificar los daños y con ello el monto de asignado del Fideicomiso del Fondo de Desastres Naturales (Fonden).
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Son los municipios de Xicotepec, Chignahuapan, Zacatlán, Cuetzalan y Tlatlauquitepec, éste último presentó un desgajamiento de tierra en la carretera que conecta a Teziutlán, situación que propició el cierre de circulación en un carril durante el paso de la tormenta tropical Franklin.
El gobernador del estado de Puebla, Antonio Gali Fayad, dio a conocer que afortunadamente no hubo pérdidas humanas y sólo esperan concluir con los peritajes para realizar los proyectos de ayuda para la población. Indicó que el pasado lunes acudió el equipo de Protección Civil estatal para revisar las condiciones en Zacapoaxtla.
Tienen hasta el viernes para concluir con el análisis de daños, con base en ello sabrán cuánto le toca invertir al gobierno del estado y cuánto es lo que pagarán los seguros, pues las cosechas están aseguradas al 100 por ciento.
Tras la declaratoria, los gobiernos municipales de Teziutlan y Chignahuapanaseguraron a través de sus departamentos de comunicación social que ya se encuentran estables y señalaron que el clima ya está templado.
En Teziutlán, compartieron que no pasó nada grave, sólo hubo pequeños deslaves y desgajamientos de árboles, pero no existió un daño que represente peligro para los habitantes o futuros visitantes.
En el refugio temporal se albergaron 177 personas que ya regresaron a sus hogares, 32 carreteras presentaron inundaciones leves, 2 escuelas y 121 casas sufrieron daños a fachadas y 26 domicilios reportaron fallas de energía eléctrica.
Por su parte, el gobierno de Chignahuapan coincidió con Teziutlán al mencionar que “lo peor ya había pasado” y esperan que los turistas no dejen de ir, así lo señaló Tomas Correa, director de Protección Civil, al referir que los caminos ya están despejados y los visitantes no corren riesgo.
El funcionario reportó inundaciones en calles de la ciudad, atendiendo un total de 34 árboles caídos que fueron retirados para no impedir la circulación.