San Miguel Chimalapa,, Oax.- Con la anuencia de comuneros de San Antonio y Benito Juárez que pertenecen al municipio de San Miguel Chimalapa, 45 familias que suman un total de 150 personas entre adultos y menores de edad conformarán un nuevo asentamiento humano para preservar el paraje El Quebrachal que es una zona que arropa maderas preciosas y animales exóticos.
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El acuerdo de la comuna se dio el pasado domingo y fue el lunes por la tarde cuando a las familias fueron ubicadas equitativamente en las tierras de El Quebrachal.
Con casas de campaña y algunas láminas, los hombres, mujeres y niños originarios de San Antonio, Benito Juárez y Ramón Escobar Balboa que antes no tenían un espacio dónde vivir, llegaron al Quebrachal para fundar un nuevo asentamiento humano con la condición de cuidar y preservar esta reserva natural prioritaria para los zoques.
Ramón Escobar Balboa, fue una comunidad que durante muchos años peleó con los comuneros zoques, sin embargo, a partir de la retención de Ángel López Sánchez, presunto comisariado de bienes ejidales ocurrida el 29 de septiembre llegaron a un acuerdo con la comuna de San Miguel Chimalapa y actualmente caminan en unidad.
En esta nueva creación de núcleo rural estuvieron presentes como testigos el comisariado de Bienes Comunales, José Medel Jiménez Cruz y el presidente del consejo de vigilancia de San Miguel Chimalapa, Rosalino Sánchez Martínez.
Sánchez Martínez informó que este nuevo asentamiento viene refuerza la solidaridad en la zona para no permitir nuevas invasiones de parte de los chiapanecos.
Reconoció que a pesar de que han logrado que las familias chiapanecas de Ramón Escobar Balboa se hayan unido a esta lucha de vivir en paz, aún falta por lograr que los habitantes también de origen chiapaneco que viven en Rudolfo Figueroa (Belisario Domínguez) acepten ser parte del territorio Chimalapa a pesar de que la controversia constitucional así lo refiere.
“El Quebrachal es una zona de maderas preciosas como el pino y el cedro, pero que lamentablemente ha sido afectado y muy saqueado por invasores, hace dos meses los empleados de la Profepa inspeccionaron la zona y verificaron esta situación, por eso este asentamiento humano es un logro y vamos a seguir vigilando para que nuestro bosque siga vivo”, recalcó.
Anunció que buscarán trabajar con la nueva administración gubernamental que encabeza Alejandro Murat, con la finalidad de que tome en cuenta una verdadera defensa del territorio zoque contra los invasores y también buscarán obras para las familias que habitan en El Quebrachal.