Puebla, Pue.- El Colegio de Postgraduados (Colpos) trabajará este año para solicitar, junto con Fundación Produce a través de productores, la denominación de origen para Puebla de la producción controlada de huitlacoche ante el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI).
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De acuerdo con Daniel Martínez Carrera, investigador de la instrucción educativa, dicha producción requiere de 500 a 2 mil metros cuadrados de superficie, además el hongo tiene propiedades para la prevención y tratamiento de la diabetes, presión alta u obesidad.
Las investigaciones apoyadas con recursos financieros del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) y la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa), apuntan a que en el huitlacoche existe la presencia de beta-glucanos, polímeros que tienen atención de la comunidad científica internacional, por sus propiedades anti-microbianas, anticancerígenas o inmunomoduladoras, entre otras, dijo.
Mauricio Mora Pérez, representante de Fundación Produce Puebla, explicó que los productores de alimentos en México, solamente obtienen el 30 por ciento de la ganancia de sus cosechas respecto de lo que paga el consumidor final, por lo cual el Colpos abrió desde ayer en su campus una subasta de una tonelada de huitlacoche y podría llegar hasta tres, en los próximos dos meses, con un valor de 60 pesos el kilogramo.
La intención, comentó, es que también los restaurantes incluyan este platillo prehispánico de regiones de Puebla en sus menús y compren directamente al consumidor final, ya que la industria del hambre la controlan ahora las tiendas de autoservicio y ahí se vende ese alimento.
Por otro lado, Martínez explicó que el plan para el siguiente año es vender entre 30 y 50 toneladas, pues además es un alimento que puede ser producido durante ocho meses cuando se controla, además de que se investiga su procesamiento para venderlo a otros países como España y europeos o ciudades como Nueva York en Estados Unidos.
En entrevista por separado, el delegado en Puebla de la Sagarpa, Hilario Valenzuela Corrales, comentó que la institución tiene cuatro años apoyando diversos proyectos del Colegio a través de un fondo compartido con el Conacyt.
El Colpos ha desarrollado un proceso biotecnológico controlado para los pequeños productores con fases que van desde el cultivo de cepas in vitro en laboratorio, la inoculación de los jilotes hasta la conservación a baja temperatura.
Finalmente, Enares Arrellano Flores, es productor de San Nicolás Zecalacoayan en el municipio de Chiautzingo y este año produjo de manera controlada huitlacoche en media hectárea, después de que en 2016 regresó de Estados Unidos y ha visto en la cosecha de este hongo del maíz un ingreso familiar.