Washington, E.U.- La investidura de Donald Trump como presidente vendrá acompañada de protestas multitudinarias al día siguiente, lo que seguramente complicará el tránsito y causará todo tipo de problemas para los habitantes de la capital estadounidense.
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No existe un consenso entre las autoridades en torno de cuánta gente vendrá para la jura, sus celebraciones y las manifestaciones en contra.
Se estima que entre 800.000 y 900.000 personas asistirán a la toma de posesión del viernes, un acto que ya de por sí frena el tránsito, complica el subterráneo y entorpece la vida de la gente.
El domingo tendrá lugar una protesta contra Trump llamada La Marcha de las Mujeres sobre Washington.
Elliott Ferguson, presidente de la comisión de turismo local conocida como Destination DC, dijo que antes de las elecciones eran muchas más las reservaciones para eventos que festejarían la esperada victoria de Hillary Clinton que las de eventos para Trump, pero a pesar de que Trump ganó, las reservaciones para él no equipararon las de tomas de posesión recientes.
“Los teléfonos no sonaron”, expresó. “El negocio ha estado mucho más débil de lo que jamás se podría anticipar para alguien que es juramentado por primera vez”, indicó Ferguson.
De hecho, dijo, ha habido más reservaciones, pero para asistir a las protestas. “Tan pronto se confirmó que la protesta iba a tener lugar, empezaron a ocuparse las habitaciones”, manifestó.
Si bien es más fácil calcular cuánta gente va a venir a la toma de posesión, gracias a modelos estadísticos y a experiencias previas, es más difícil saber cuánta acudirá a la protesta el día después. En la solicitud de autorización para La Marcha de las Mujeres sobre Washington, los organizadores pusieron la cifra de 200.000 personas.
En tanto, el documentalista Michael Moore convocó a una protesta en Nueva York, frente a la Torre Trump para el jueves.
Moore informó ayer que asistirán los actores Mark Ruffalo y Alec Baldwin, además del reverendo Al Sharpton, y el alcalde de Nueva York, el demócrata Bill de Blasio.